El tratamiento de ortodoncia no concluye al alcanzar la sonrisa deseada; tras la retirada del aparato, es crucial mantener la posición lograda mediante el uso de retenedores.
Los dientes tienden naturalmente a regresar a su ubicación original, ya que el hueso alveolar y los ligamentos dentales tienen una «memoria» que busca recuperar la posición anterior al finalizar la fase activa del tratamiento ortodóncico.
En Loscos Ortodoncia, te ofrecemos una explicación detallada sobre los retenedores: su función, los tipos disponibles y consejos para su correcto mantenimiento.
¿Cuáles son las funciones principales de los retenedores?
Los retenedores se emplean después de retirar los aparatos de ortodoncia con el propósito de mantener los dientes en su nueva posición y prevenir la recidiva, que implica el retorno de los dientes a su posición original.
Estos son esenciales debido a las posibles posiciones inestables postratamiento, donde los tejidos periodontales necesitan tiempo para reorganizarse. Además, el crecimiento continuo de los dientes después del tratamiento puede afectar los resultados, resaltando la importancia fundamental de los retenedores para preservar la alineación dental a largo plazo.
¿Qué tipos de retenedores existen?
Hay varios tipos de retenedores diseñados para preservar los resultados obtenidos durante tu tratamiento de ortodoncia en Zaragoza:
Retenedores removibles.
Son aquellos que se pueden quitar y poner, desempeñando una función intermitente. En las primeras fases, se usan de manera permanente, reduciendo progresivamente su tiempo de empleo. Existen varias opciones:
- Retenedores Hawley: Se fabrican mediante un molde del paladar y la arcada correspondiente. Aunque la pieza final es removible y cubre parcialmente el paladar, puede afectar al habla. Sin embargo, destaca por su durabilidad y la capacidad de ajuste de los soportes metálicos. Puede funcionar como retenedor activo, permitiendo leves modificaciones para ajustar el movimiento dentario.
- Retenedores envolventes: También llamados termoplásticos, son más económicos y estéticos, pero menos adecuados para casos de expansión de arcadas dentarias o sobremordida completa. Permiten la alineación de incisivos irregulares tras el tratamiento, debiendo usarse todo el día, excepto durante las comidas, durante unos 5-7 días. Luego, se reemplaza por uno nuevo.
Retenedores fijos.
Cementados en la parte posterior de los dientes, son discretos y actúan las 24 horas del día, siendo retirados solo por el doctor en la clínica. Fabricados en diferentes materiales (metal, fibra de vidrio, níquel-titano), se colocan como láminas en la parte interna de los dientes. Su comodidad y estética los hacen aptos para un uso prolongado, aunque se desaconseja en casos de higiene dental deficiente.
La elección entre retenedores fijos y removibles dependerá de las preferencias individuales y las necesidades específicas de cada paciente. Los retenedores removibles facilitan la limpieza bucodental diaria, pero su efectividad está vinculada a la constancia y frecuencia de uso.
En nuestra clínica dental de ortodoncia en Zaragoza, te informaremos de todas las opciones y te recomendaremos el retenedor más adecuado para tu caso.
¿Cuánto tiempo se utiliza el retenedor de ortodoncia?
El periodo de uso del retenedor puede variar según la recomendación de tu ortodoncista y las necesidades específicas de tu caso.
Inicialmente, se sugiere usar el retenedor a tiempo completo, es decir, durante todo el día y la noche, lo cual puede extenderse por varios meses.
En la clínica dental, planificaremos revisiones regulares para evaluar tu progreso y determinar si es necesario ajustar la frecuencia de uso del retenedor.
Recomendaciones para el correcto cuidado de los retenedores:
- Mantén una higiene bucodental óptima: Asegúrate de cepillar cuidadosamente alrededor de los alambres y entre los dientes para prevenir la acumulación de placa. En el caso de los retenedores móviles, límpialos diariamente con un cepillo suave, agua tibia y jabón neutro para evitar la acumulación de bacterias.
- Programa revisiones regulares con tu ortodoncista para evaluar la condición de los retenedores y abordar cualquier problema a tiempo.
- Cuando no estés utilizando tu retenedor removible, guárdalo adecuadamente en el lugar designado.
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